Al público: letras y circo
Fabiola Panchi
Cuando somos niños e incluso cuando crecemos y escuchamos la palabra circo, ésta trae a nuestra mente: trapecistas, acróbatas, payasos, domadores, fenómenos y animales exóticos, quienes llevan a cabo actos extraordinarios, regalándonos por algunos momentos una exhibición asombrosa cuyo objetivo principal es divertirnos. Por otro lado, la literatura que trata sobre el espectáculo antes mencionado, no sólo divierte, sino que lleva a los espectadores/lectores a un mundo donde lo imposible cobra sentido de posibilidad.
Ana María Shua publicó hace cinco años el libro de microrrelatos: Fenómenos de circo, en él la argentina se da a la tarea de presentarnos, a través de distintos apartados, cómo se compone el espectáculo circense. Haciendo uso de paradojas, hipérboles, ironías, prosopopeyas, narradores omnipresentes y protagonistas, hace que el lector, sin importar su edad, se sumerja en las distintas secciones que conforman los textos.
En “Todo es circo”; el primer apartado del libro, se nos presentan relatos que cuentan cómo se construye una función, y cómo ésta se conforma de artistas, animales y espectadores. Uno de los microrrelatos que más me gustó es el que se titula: “Medidas relativas”, aquí se narra de manera sintetizada e inteligente la forma y el cómo se llega a la medida perfecta para pertenecer al circo, pues alcanzar el tamaño adecuado no siempre es fácil.
“Los oficios”, es el nombre del segundo apartado. Aquí nos narra, de manera muy particular, la forma en que trapecistas, acróbatas, domadores, magos, payasos, ecuyeres, funambulistas, lanza cuchillos y tragafuegos desarrollan sus talentos y habilidades. Estos personajes viven una vida atractiva, que despierta en el público interés y curiosidad en relación a las actividades desafiantes que realizan, y otorgan un significado distinto y emocionante a todas las artes que se llevan a cabo dentro de una carpa. La minificción que me pareció más interesante y sorprendente es la que se titula: “el disfraz”, en ella se describe la manera en la que el dueño del circo y un payaso guardan celosamente un secreto que al ser descubierto sorprenderá a los espectadores y alguno que otro miembro del circo.
Otro apartado se titula “Los freaks”; en éste se enuncia a todos aquellos que, dentro de los estándares de lo que se considera normal, no tuvieron un sitio al cual pertenecer y se vieron obligados a ir al circo, lugar donde su extrañeza es reconocida y admirada por todos aquellos que alguna vez los miraron con horror y hoy la curiosidad los trae al sitio perfecto para apreciar el espectáculo de la anormalidad. Aquí el microrrelato que sobresale se llama: “Fenómenos y números”; donde se cuenta como los seres raros que habitan el circo se las ingenian para realizar sus actos con pocas o nulas capacidades para ejecutarlos.
El antepenúltimo apartado lleva por título “Los animales”, y nos muestra cómo los felinos, los elefantes, las especies exóticas e incluso los animales mitológicos son parte fundamental y necesaria dentro de la gala circense, pues permiten al público apreciar cómo aquellas bestias entienden el lenguaje del ser racional, ya que a través de los aplausos y ovaciones se vuelven una parte importante del circo y de los espectadores. Asimismo nos presenta y plantea el problema ético de si los circos aún deben tener animales en cautiverio.
En este apartado, el texto que más me atrapó se titula: “La gran atracción”; que nos enseña hasta donde un animal es capaz de obedecer y actuar para ganar los aplausos de quien se deleita mirando su número. Lo que más sorprende de este relato es saber a qué especie animal pertenece la estrella que ha cautivado al público.
La última parte del libro lleva por nombre “Historia del circo”, aquí se narra cómo fue que surgió este espectáculo. Se presentan datos sobre el primer circo y la manera en que éste evolucionó y mejoró en sus trucos y suertes, hasta despertar en el público gusto y admiración por en él se representaba.
Hace tiempo que escuché sobre los microrrelatos, pero no sabía nada sobre el tema; después de leer Fenómenos de circo, me di cuenta que este género literario exige mucho de sus lectores. Por esta razón, si me preguntarán qué libro recomendaría para entrarle a esta forma de literatura, sin duda alguna sugeriría que leyeran el texto de Ana María Shua. Todas las narraciones que ella escribió se nos ofrecen a los lectores de manera novedosa, invitándonos a conocer en las minificciones una temática poco tratada en la literatura como es el caso del circo.
Ana María Shua publicó hace cinco años el libro de microrrelatos: Fenómenos de circo, en él la argentina se da a la tarea de presentarnos, a través de distintos apartados, cómo se compone el espectáculo circense. Haciendo uso de paradojas, hipérboles, ironías, prosopopeyas, narradores omnipresentes y protagonistas, hace que el lector, sin importar su edad, se sumerja en las distintas secciones que conforman los textos.
En “Todo es circo”; el primer apartado del libro, se nos presentan relatos que cuentan cómo se construye una función, y cómo ésta se conforma de artistas, animales y espectadores. Uno de los microrrelatos que más me gustó es el que se titula: “Medidas relativas”, aquí se narra de manera sintetizada e inteligente la forma y el cómo se llega a la medida perfecta para pertenecer al circo, pues alcanzar el tamaño adecuado no siempre es fácil.
“Los oficios”, es el nombre del segundo apartado. Aquí nos narra, de manera muy particular, la forma en que trapecistas, acróbatas, domadores, magos, payasos, ecuyeres, funambulistas, lanza cuchillos y tragafuegos desarrollan sus talentos y habilidades. Estos personajes viven una vida atractiva, que despierta en el público interés y curiosidad en relación a las actividades desafiantes que realizan, y otorgan un significado distinto y emocionante a todas las artes que se llevan a cabo dentro de una carpa. La minificción que me pareció más interesante y sorprendente es la que se titula: “el disfraz”, en ella se describe la manera en la que el dueño del circo y un payaso guardan celosamente un secreto que al ser descubierto sorprenderá a los espectadores y alguno que otro miembro del circo.
Otro apartado se titula “Los freaks”; en éste se enuncia a todos aquellos que, dentro de los estándares de lo que se considera normal, no tuvieron un sitio al cual pertenecer y se vieron obligados a ir al circo, lugar donde su extrañeza es reconocida y admirada por todos aquellos que alguna vez los miraron con horror y hoy la curiosidad los trae al sitio perfecto para apreciar el espectáculo de la anormalidad. Aquí el microrrelato que sobresale se llama: “Fenómenos y números”; donde se cuenta como los seres raros que habitan el circo se las ingenian para realizar sus actos con pocas o nulas capacidades para ejecutarlos.
El antepenúltimo apartado lleva por título “Los animales”, y nos muestra cómo los felinos, los elefantes, las especies exóticas e incluso los animales mitológicos son parte fundamental y necesaria dentro de la gala circense, pues permiten al público apreciar cómo aquellas bestias entienden el lenguaje del ser racional, ya que a través de los aplausos y ovaciones se vuelven una parte importante del circo y de los espectadores. Asimismo nos presenta y plantea el problema ético de si los circos aún deben tener animales en cautiverio.
En este apartado, el texto que más me atrapó se titula: “La gran atracción”; que nos enseña hasta donde un animal es capaz de obedecer y actuar para ganar los aplausos de quien se deleita mirando su número. Lo que más sorprende de este relato es saber a qué especie animal pertenece la estrella que ha cautivado al público.
La última parte del libro lleva por nombre “Historia del circo”, aquí se narra cómo fue que surgió este espectáculo. Se presentan datos sobre el primer circo y la manera en que éste evolucionó y mejoró en sus trucos y suertes, hasta despertar en el público gusto y admiración por en él se representaba.
Hace tiempo que escuché sobre los microrrelatos, pero no sabía nada sobre el tema; después de leer Fenómenos de circo, me di cuenta que este género literario exige mucho de sus lectores. Por esta razón, si me preguntarán qué libro recomendaría para entrarle a esta forma de literatura, sin duda alguna sugeriría que leyeran el texto de Ana María Shua. Todas las narraciones que ella escribió se nos ofrecen a los lectores de manera novedosa, invitándonos a conocer en las minificciones una temática poco tratada en la literatura como es el caso del circo.
Shua, A. M. (2011). Fenómenos de circo. Madrid: Páginas de Espuma.